Una noche me encontré pensando
en que pensaba lo que piensa
la gente cuando está
enamorada,
y de tanto pensar el pensamiento
convencido estaba de que en tu mirada
vientos nuevos me esperaban,
así que corrí al pensamiento que pensaba
que enamorado de ti estaba y ahí me quedé
hasta que la noche estrellada terminó
con el pensamiento de una persona
enamorada.
bloopers taller de redacción #1
Cuando conocí a Natalia
Dime con quién andas y te diré quién eres, siempre me había dicho mi madre, pero cuando conocí a Natalia no hubo refrán que valiera. Volví a nacer.
Para esos tiempos mi papá andaba en otra de sus crisis, por lo que estaba internado en el hospital. Todas las tardes lo visitaba, miraba cómo estaba y, al salir, hablaba con cualquier enfermera que me encontrase en el camino. Siempre detenían lo que estaban haciendo, me regalaban una sonrisa, un mensaje de aliento y al rato salían corriendo detrás de un nuevo muerto: definitivamente con ellas la vida es más agradable.
En fin, en esas andaba yo por ese tiempo cuando en ese infierno lleno de ángeles, por una de esas casualidades del destino o qué se yo, el "universo conspiró a mi favor" (como diría el estúpido de Coehlo) y la vi por primera vez. Estaba muerta de risa -algo paradójico por el lugar en el que estábamos, y en ese tiempo que estuve mirándola todo a mi alrededor se detuvo un segundo para volver a iniciar por un tropiezo que me sacó del lapsus. Ya en ese momento, alejado de la ensoñación pude ver los detalles que integraban a esa mujer: su cabello, rostro, la ropa y la jeringa llena de sangre agarrada como mosquito a su brazo. Poco importaron los detalles y fui tras ella. Hola, le dije, mientras que Natalia lanzaba la expresión "La buena pa' ti" a uno de sus compañeros que ya se iba y luego de so volteó su rostro hacía mí y me miró. Fue justo en ese momento, no antes ni después, cuando caí en la tentación.
Nuestra relación anduvo bien los primeros meses, funcionaba como una especie de paliativo para el dolor por mi padre, sin embargo, de un momento a otro todo se fue al carajo: las discusiones aumentaban, nos gritábamos y nos haciamos mucho daño. Entonces, en un momento de iluminación sobrenatural, se me ocurrió que todo esto era causado por aquel famoso mosquito, así que en aras de solucionar toda nuestra mierda lo hice. La usé. Ella, mientras, me susurraba al oído, me decía que todo se volvería delicioso y que todo bien, que la vida era corta, que la finitud del ser, que la autodestrucción, que no sé qué, y al tiempo que ese liquido entraba en mi cuerpo (o enunciaciones, como me habían dicho en mi clase de Redacción) se diluían y transformaban y en lo que en algún momento fueron palabras se convirtieron en ruido blanco.
Desperté en una habitación del color del ruido, con una luz que me cegaba y cuando salí del letargo recordé y me repetí para mis adentros lo que siempre le decía a mi hijo cuando preguntaba por Natalia: "Allí la conocí una tarde cuando venía del hospital". Entró una enfermera, entró un joven que se parecía a mí o era yo y la muchacha de blanco le decía que otra recaída, que no deja de gritar Natalia y me volví a dormir mientras aquel joven que era yo me miraba con desprecio. Caí en las tinieblas y volví a recordar. "Dime con quién andas y te diré quién eres", siempre me había dicho mi madre, pero lo que ella no sabía es que yo no sé quién soy yo. Y salí del hospital y vi a Natalia y vi a mi hijo o a mí en la habitación blanca y caí en las tinieblas, otras.
zzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz
... La sensación no desaparecería. Volvería a nacer yo para ser suficiente para ti, mudaría mis pieles para ser yo tu necesidad. Por ahora sólo me queda imaginar, escribir...
s.t
Aquel valiente que le gana a la vida y a la muerte,
poniendo detrás la carne y adelante el espíritu,
pintando las paredes con hierro
y el piso con la postal de un cuerpo frío.
Tú, valiente, entendiste la vida mejor que nadie
y corriste,
porque suficiente es haber nacido,
como para esperar a que venga la muerte.
poniendo detrás la carne y adelante el espíritu,
pintando las paredes con hierro
y el piso con la postal de un cuerpo frío.
Tú, valiente, entendiste la vida mejor que nadie
y corriste,
porque suficiente es haber nacido,
como para esperar a que venga la muerte.
18 de dic.
Eres un pequeño abrazo
en la soledad de mi cuarto,
aun cuando no te tengo
a mi lado.
La lejanía, sin embargo, puede unirnos
y la carrera por lo que llamamos
amor,
no ha empezado...
Por ahora gritemos contentos
a través de la pantalla,
mandemos besos y promesas.
Hagamos felices nuestra existencia
con el fantasma de una presencia
ausente en nuestras vidas.
en la soledad de mi cuarto,
aun cuando no te tengo
a mi lado.
La lejanía, sin embargo, puede unirnos
y la carrera por lo que llamamos
amor,
no ha empezado...
Por ahora gritemos contentos
a través de la pantalla,
mandemos besos y promesas.
Hagamos felices nuestra existencia
con el fantasma de una presencia
ausente en nuestras vidas.
Feliz cumpleaños.
El pasillo a la 1:30
I.
Mis ojos te miran mientras
caminas altiva,
al son de ángeles inexistentes
que me hacen soñar.
La muerte atraviesa mi pecho
y un último suspiro
lleva tu nombre.
II.
Se estremece el cuerpo
al ver tu foto frente al
espejo
que casi no puede copiar
tu infinita perfección:
una mirada cansada,
cabello negro,
piel lisa como perlas.
Sí, se estremece el cuerpo,
al igual que el espejo,
porque la cercanía a tal Ser
quema y quiebra.
Quisiera ser tu espejo,
verte reflejada en mí y,
al tiempo,
verme reflejado en tu mirar.
III.
Mi labor en la vida es describirte.
Describir todas y cada una
de las líneas de tu rostro,
la sinuosidad de tus labios,
la profundidad de tu pupila,
el color de tus ojeras.
También es labor mía
derretirme hasta el fin de
dulzura en tus brazos.
IV.
Mujer de belleza deprimente,
que con el solo mirar congela,
te sé inalcanzable y tu rostro,
indeleble, se queda para siempre
en mi corazón, haciendo de mi sufrir
una eternidad.
V.
Qué más puede ser el amor,
sino la sed de estar junto
a Ti,de sentirte a mi lado y
vernos invencibles el uno al otro.
Qué más puede ser el amor,
sino la constante mirada
al vacío buscando tu rostro.
Qué más puede ser el amor,
sino el cantar de tu
voz.
VI.
"Lo esencial es invisible a los ojos",
por eso yo escribí este poema para Ti
-que no es el papel donde se plasma-
sino mis palabras sentidas
tratando de llegar, puras,
a tu corazón.
VII.
Un dolor muy hondo se posa en mi alma,
cuando de tu mirada fría
se desprende el vil rechazo
-xxxxxxxxxxxxxxxx-
VIII.
Aspiro a pisar la tierra que pisaste
para tratar de encontrarte
-sintiendo el calor de tu esencia-
y recoger algo de las calles,
y respirar el aire que respiraste,
y ver las flores en las esquina,
y ver San Diego a lo lejos,
y ahí, de pie, viendo todo eso:
imaginarme a tu lado.
Mis ojos te miran mientras
caminas altiva,
al son de ángeles inexistentes
que me hacen soñar.
La muerte atraviesa mi pecho
y un último suspiro
lleva tu nombre.
II.
Se estremece el cuerpo
al ver tu foto frente al
espejo
que casi no puede copiar
tu infinita perfección:
una mirada cansada,
cabello negro,
piel lisa como perlas.
Sí, se estremece el cuerpo,
al igual que el espejo,
porque la cercanía a tal Ser
quema y quiebra.
Quisiera ser tu espejo,
verte reflejada en mí y,
al tiempo,
verme reflejado en tu mirar.
III.
Mi labor en la vida es describirte.
Describir todas y cada una
de las líneas de tu rostro,
la sinuosidad de tus labios,
la profundidad de tu pupila,
el color de tus ojeras.
También es labor mía
derretirme hasta el fin de
dulzura en tus brazos.
IV.
Mujer de belleza deprimente,
que con el solo mirar congela,
te sé inalcanzable y tu rostro,
indeleble, se queda para siempre
en mi corazón, haciendo de mi sufrir
una eternidad.
V.
Qué más puede ser el amor,
sino la sed de estar junto
a Ti,de sentirte a mi lado y
vernos invencibles el uno al otro.
Qué más puede ser el amor,
sino la constante mirada
al vacío buscando tu rostro.
Qué más puede ser el amor,
sino el cantar de tu
voz.
VI.
"Lo esencial es invisible a los ojos",
por eso yo escribí este poema para Ti
-que no es el papel donde se plasma-
sino mis palabras sentidas
tratando de llegar, puras,
a tu corazón.
VII.
Un dolor muy hondo se posa en mi alma,
cuando de tu mirada fría
se desprende el vil rechazo
-xxxxxxxxxxxxxxxx-
VIII.
Aspiro a pisar la tierra que pisaste
para tratar de encontrarte
-sintiendo el calor de tu esencia-
y recoger algo de las calles,
y respirar el aire que respiraste,
y ver las flores en las esquina,
y ver San Diego a lo lejos,
y ahí, de pie, viendo todo eso:
imaginarme a tu lado.
"Vengan, amigos.
No es muy tarde para buscar un
nuevo mundo,
pues es mi propósito navegar
más allá del atardecer.
Y aunque ahora no tenemos la fuerza que antes
-movilizó a la tierra y el cielo, somos lo que somos:
un temperamento igualitario de
corazones heróicos debilitado por el
tiempo y el destino, pero fuerte en voluntad.
Para luchar, buscar, encontrar y nunca rendirse"
No es muy tarde para buscar un
nuevo mundo,
pues es mi propósito navegar
más allá del atardecer.
Y aunque ahora no tenemos la fuerza que antes
-movilizó a la tierra y el cielo, somos lo que somos:
un temperamento igualitario de
corazones heróicos debilitado por el
tiempo y el destino, pero fuerte en voluntad.
Para luchar, buscar, encontrar y nunca rendirse"
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